La Fundación Miguel Ríos, a través de Espacio Caja Sonora y la Universidad de Granada a través de Medialab UGR, impulsan un innovador programa de prácticas extracurriculares enfocado en los Laboratorios Música y Sociedad. Este proyecto busca utilizar la música como herramienta para abordar desafíos sociales y fomentar la conexión entre comunidades. Concebido como un espacio de experimentación y creación, estos laboratorios permiten a jóvenes estudiantes, artistas y vecinos de Granada trabajar juntos en temáticas clave para su entorno.
De la propuesta a la acción: iniciando la segunda fase
Tras completar con éxito la primera etapa, centrada en la propuesta y selección de ideas, se inicia ahora la fase dos, donde se desarrollarán proyectos concretos basados en las temáticas seleccionadas: “Sonidos de Granada” y “Mujeres en el rock”. Estas líneas de acción abordarán cuestiones como la identidad urbana, la cohesión social y la inclusión en la industria musical.
“Sonidos de Granada”: conectando identidad y espacio urbano
Granada, con su riqueza cultural y diversidad social, es un microcosmos ideal para explorar la relación entre los sonidos cotidianos y la identidad de sus barrios. Según el análisis del proyecto Sonidos de Granada, esta ciudad alberga dinámicas complejas: desde los flujos de turistas y estudiantes hasta los desafíos de la gentrificación en áreas como el Albaicín y el Realejo.
Los barrios de Granada tienen paisajes sonoros únicos que reflejan su identidad social y cultural. Por ejemplo, los sonidos del Sacromonte evocan su tradición flamenca, mientras que los barrios como La Chana ofrecen una vibrante actividad comunitaria. El modelo turístico actual ha transformado el entorno sonoro, afectando la autenticidad de espacios clave. En este contexto, este laboratorio busca documentar y reinterpretar estos sonidos para crear conciencia sobre los cambios urbanos.
Con este objetivo en mente, la iniciativa recopilará grabaciones sonoras en diferentes barrios y horarios. Estas se transformarán en composiciones musicales que destaquen la diversidad y los retos de cada zona.
Hacia una escena inclusiva: reivindicando el papel de las mujeres en el rock
El laboratorio “Mujeres en el rock” aborda un desafío crucial en la industria musical: la desigualdad de género, especialmente en el ámbito del rock, donde las mujeres han sido históricamente subrepresentadas y enfrentan barreras estructurales. A pesar de ser figuras clave en el desarrollo de este género, las narrativas dominantes las han invisibilizado, limitando su reconocimiento y relegándolas a roles secundarios. Durante décadas, las mujeres se vieron obligadas a adaptarse a un espacio que no las consideraba iguales, enfrentando estereotipos que las encasillaban como «la musa», «la vocalista atractiva» o simplemente «la novia de». Sin embargo, muchas han roto estos moldes, destacando como guitarristas, bateristas, productoras y compositoras innovadoras.
A pesar de estos avances, las barreras persisten. La industria musical continúa sexualizando y subestimando a las mujeres, quienes tienen menos oportunidades para liderar bandas, acceder a festivales importantes o conseguir contratos discográficos. Esto se refleja también en el público y los medios especializados, donde las artistas femeninas reciben menos cobertura y reconocimiento que sus contrapartes masculinas.
Es por ello que este laboratorio no sólo reflexionará en torno a los motivos y el origen de esta desigualdad sino que, centrándose en la escena de Granada, trabajará en la sensibilización sobre la importancia de crear entornos respetuosos y libres de acoso en eventos de música en vivo. En síntesis, este laboratorio no solo busca equilibrar las oportunidades en el rock, sino también transformar la narrativa de este género en la ciudad. El objetivo final es crear un entorno donde las mujeres puedan participar, crear y liderar sin ser limitadas por los prejuicios de género, consolidando así un rock más diverso, inclusivo y rico en perspectivas.
La música como vehículo de transformación social
La puesta en marcha de estos laboratorios refuerza el compromiso de Espacio Caja Sonora y la Fundación Miguel Ríos con la participación ciudadana como base para enfrentar retos colectivos. La música, en su capacidad transformadora, conecta a las personas con su entorno y fomenta un cambio social significativo. Estos laboratorios no solo ofrecen soluciones innovadoras, sino que también promueven un diálogo abierto entre generaciones y comunidades diversas. Con el apoyo de vecinos, artistas y estudiantes, este programa representa un paso decisivo hacia una sociedad más inclusiva y culturalmente rica.